NUEVA YORK, 28 Mar. (EUROPA PRESS) -
El relator especial de la ONU contra la tortura, Manfred Nowak, consideró ayer deplorables las condiciones en las que se encuentran algunas comisarías y prisiones que visitó con motivo de su misión en el país iberoamericano.
En declaraciones al finalizar su viaje de cinco días, Nowak señaló que la situación de las cárceles han ido empeorando constantemente en los últimos años. No obstante, calificó de alentador el hecho de que la custodia policial esté salvaguardada por el 'habeas corpus', y que las personas sean presentadas ante un juez tras 24 ó 48 horas como plazo máximo, para evitar que su estancia en las comisarías sea de larga duración.
Nowak recordó que la preocupación por la mala situación de las cárceles y otros centros de detención fue reconocida por el Gobierno uruguayo en 2005, cuando declaró el estado de emergencia humanitaria debido a la situación de las cárceles.
"Existe una necesidad urgente de tomar medidas contra dichas violaciones de Derechos Humanos a gran escala", dijo el experto en declaraciones recogidas por el centro de noticias de la ONU.
El riesgo de colapso del sistema penitenciario y la falta de un plan alternativo son una fuente seria de inseguridad, violencia y deterioro de los valores básicos que tienen un gran impacto en la sociedad en general. El pueblo de Uruguay, un país reconocido por su democracia y desarrollo social, no merece este sistema penitenciario, subrayó Nowak.
El relator especial de la ONU contra la tortura, Manfred Nowak, consideró ayer deplorables las condiciones en las que se encuentran algunas comisarías y prisiones que visitó con motivo de su misión en el país iberoamericano.
En declaraciones al finalizar su viaje de cinco días, Nowak señaló que la situación de las cárceles han ido empeorando constantemente en los últimos años. No obstante, calificó de alentador el hecho de que la custodia policial esté salvaguardada por el 'habeas corpus', y que las personas sean presentadas ante un juez tras 24 ó 48 horas como plazo máximo, para evitar que su estancia en las comisarías sea de larga duración.
Nowak recordó que la preocupación por la mala situación de las cárceles y otros centros de detención fue reconocida por el Gobierno uruguayo en 2005, cuando declaró el estado de emergencia humanitaria debido a la situación de las cárceles.
"Existe una necesidad urgente de tomar medidas contra dichas violaciones de Derechos Humanos a gran escala", dijo el experto en declaraciones recogidas por el centro de noticias de la ONU.
El riesgo de colapso del sistema penitenciario y la falta de un plan alternativo son una fuente seria de inseguridad, violencia y deterioro de los valores básicos que tienen un gran impacto en la sociedad en general. El pueblo de Uruguay, un país reconocido por su democracia y desarrollo social, no merece este sistema penitenciario, subrayó Nowak.
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